domingo, 18 de mayo de 2014

Y ¿qué tal si…?

A lo largo de mi vida me he hecho varias preguntas, ¿qué pasaría si no fuera como soy? Quiero decir, ¿qué sería de mí? ¿De las personas que me rodean? ¿De mis amigos? ¿Mi familia?, simplemente me gustaría saberlo.

Y ¿qué tal si no estuviera vivo? Simplemente este mundo no sería como es, quizás suene un poco egocentrista, pero creo que habría un vacío en la mayoría de las personas que me conocen. Si no estuviera vivo, mis amigos más apegados no serían como son, es increíble la forma en la cual una persona influye en la vida de otra, todos influyen en mi vida y yo en la de ellas (pienso yo). Gracias a Dios estoy vivo.

Y ¿qué tal si fuera feliz? Me refiero a que no soy feliz porque no tengo todo lo que quiero, si fuera feliz mi vida sería mejor, si fuera feliz no sería como soy, si fuera feliz tendría otra actitud ante la vida, si fuera feliz, simplemente mi vida sería otra, pero no sería la correcta, ya que la vida te enseña a salir adelante con lo que tienes. Gracias a Dios soy infeliz.

Y ¿qué tal si fuera mujer? Sería la peor mujer del mundo: por mi actitud, porque soy bipolar, porque no aguanto nada, porque siendo hombre soy dramático solo imagínense como sería si fuera mujer, sería la por mujer por muchas cosas. Gracias a Dios nací hombre y moriré siendo hombre.

Y ¿qué tal si no estuviera en dónde estoy? Si no estuviera en el CAG, no sería quien soy simplemente, he aprendido tantas cosas, y no solo en el ámbito educativo, sino en que gracias a las personas he aprendido, mucho acerca de la vida, si no estuviera en donde estoy quizás estaría perdido en algún otro lugar, haciendo nada, siendo nadie.

Y ¿qué tal si ella fuera mía? Volvería a hablar de la felicidad, si ella fuera mía yo sería la persona más feliz de este mundo, la cuidaría como a un tesoro, si ella fuera mía yo haría todo lo posible por hacerla feliz, para que siempre estuviera sonriendo, si ella fuera mía todo cambiaría, todo sería perfecto. Igualmente le doy gracias a Dios porque no es mía, porque quién sabe qué hubiera pasado si así fuera.

Y ¿qué tal si no me gustara el fútbol? No estaría vivo posiblemente, el futbol es mi vida, yo desayuno fútbol, almuerzo fútbol, ceno fútbol, vivo y respiro fútbol. Si no me gustara el fútbol quizás sería una de esas personas que odian su vida. Si antes mencioné que no soy feliz podría hacer un pequeño (gran) paréntesis, para poder decir que el fútbol me hace feliz, si no me gustara el fútbol simplemente no estaría vivo, si no me gustara el fútbol no hubiera llenado mi álbum de Brasil 2O14, no hubiera jugado tantos partidos, tantas chamuscas, ganado muchas y perdido otras, si no me gustara el fútbol simplemente no sería quien soy, Gracias a Dios me encanta el fútbol.


Y ¿qué pasaría si hoy muriera?... Todo cambiaría.

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